DIA 20

A ver.
Primero estaré en Canadá como 18 horas. En Toronto.
No es terrible porque estoy segura que Taulis me irá a ver. Y parece además, que nos llevarán a conocer las Cataratas del Niágara.
Y me gusta no ser de ningún lado. Ser de un aeropuerto es como ser del mundo. Ser de un tiempo impreciso.
Bueno, eso lo supe ayer, DIA 20.
Lo otro es que me quedan sólo 2 sesiones de sic. y ha sido demasiado gratificante. Conversar con ella es develar los misterios inconcientes que habitan en mi como pandilleros porfiados, que se aparecen de repente y dejan la escoba. Y es muy jevy darse cuenta de los atentados que uno comete contra sí mismo.
En fin.

He comido piña hasta de noche.
Tengo cara de piña, ya.

Después me junté con mis adorados

SAN MARTÍN y FEÑI en el 125. Uno de mis lugares favoritos.
Tomaron shop.
Yo pisco sour.
Después llegó Nacho. Tiene ojos de agüita. Es lindo el niño.

Con hambre, mucha, nos fuimos a Big Pan a comer unos enormes especial tomate. Se me cayó la mitad porque de verdad que eran grandes.
Me gusta mucho el especial tomate, es mi favorito porque tiene la mezcla exacta de frescura y grasa. Y como no como todos los días es más rico aún. Sabe bien y en Big Pan la mayonesa es casera, nada de batidos transgénicos.

Mandé la última columna escrita en Chile. Se llama Señor Viaje. Léanla sino este el próximo domingo 11.
Mi editora me pidió que no dejara de escribir así que le propuse la internacionalización de la sección y me dijo que si. Así que me leerán los domingos en el Mercurio con mis columnas sobre la vida cotidiana en Savigny sur Orge y sus alrededores.
Felicidad.
Cantidad (citando a amiga dulce)

Y.
Eso.



DIA 20 así se fue.