jueves, enero 19, 2006

El medio día

Vengo llegando, oiga.
Chutis.
Agarré el penúltimo tren hacia Corbeil.
O sino no llego. O sea, igual llego pero a pie caminando por calles desconocidas. Lo que nunca está mal cuando una se alimenta de la aventura.
Son las 1 y media de la mañana. Ni tan tarde pero cuando una habita en el
"banlieu"
hay que tomar precauciones.
Como: carretear temprano o
quedarse en casa de alguien o
quedarse vagando por París hasta las 6 de la mañana.
Yo no hice eso porque mañana trabajo.
Soy reponsable pue...
Este día fue laaaaaaargo.
De partida clases temprano.
Después ir a la Prefecture de Evry a dejar mis papeles para el Titre de Sèjour que es
la Carta de Residencia que es
lo que oficializa mi paso por Francia y me permite trabajar y vivir en paz.
Pero este sistema Francés es una verdadera mierda.
Porque sus contradicciones hace que todo sea una lata
y una manera poco delicada para decir
TU NO ERES DE ACA...RECUÉRDALO.
Dejé mis papeles y se supone que me tenían que dar una cosa
papel ordinario
llamado RECEPISÉ
que es un titre de sèjour provisorio.
Esto es que por si algún día algún policía o alguna persona que busca ilegales me encuentra
yo le muestro el RECEPISÉ y le queda claro que yo acá trabajo
y que mi verdadero titre de sèjour está en proceso.
El punto es que paso mis papeles y mis fotos
y no me dan el RECEPISÉ.
"¿Pero cómo señorita si todos los asistentes tienen el suyo...por qué yo no?"
(con cara de poto y una sonrisa apestosa)"Ah...no sé, es que acá no se da eso porque el trámite se hace por correo"
"Pero oiga...deme algo para certificar que mi titre de sèjour está en proceso"
"No, no puedo darle nada, lo siento. Acá no se da ese RECEPISÉ ni ningún otro papel"
"Pero oiga, yo tengo que viajar a España por avión y mi visa está vencida...me puede pasar algo"

Y ESTO ES LO MÁS ABSURDO:
"Si eso le pasa dígale a la policía que llame para acá y nosotros le decimos que usted está en proceso"
Ya.
Vaya.
O sea.
Mi seguridad peligra porque no pueden ayudarme en nada.
Me dio una rabia.
Por más que traté de hacerle ver que su postura era absurda y contradictoria no logré nada.
Es decir.
Ando con mi visa vencida y sin embargo me descuentan de mi sueldo para mil cosas que ni siquiera puedo utilizar porque no tengo el titre de sèjour.
Y lo más estúpido es:
"¿Y cuándo tendré mi titre de sèjour?"
" EN TRES MESES MÁS"
Es decir, cuando agarre mis pilchas y me vaya de este país.
No sé que pensar.
Es más, ni siquiera pienso porque me da lata esforzarme en entender un sistema que de tan PRIMERMUNDISTA se transforma en un chiquero.
Pero
debo hacer algo porque no puedo viajar con mi visa vencida
Es decir, me pueden prohibir tomar el avión.
Guácala. Que lata todo esto de trámites y leseo absurdo.

Así que con penita me fui de ese atado de trámites rumbo a París.
Y llegué a mi primer barrio, el 11 eme arrondisement.
Lo recorrí entero de nuevo.
Pasé por el albergue en el que estuve una semana y me dio una nostalgia enorme porque me acordé de toda mis primeras emociones en tierra francesa.
Me acordé de mi sensación de abismo, de curiosidad, de sentir que no conocía absolutamente nada. Y también sentir incertidumbre por todo.
A estas alturas, ya 4 meses, me siento constituída. No sólo conozco París sino que la incertidumbre se fue porque tengo mi vida armada, organizada.
Como que sé lo que hago, por qué y hasta cuándo.
Esa sensación de vulnerabilidad ya se fue.
Y pasé por el albergue y sentí que era un
RECUERDO.
Eso fue lo mas jevy.
Tengo RECUERDOS de esto que será después otro gran recuerdo.
También recorrí la Rue Faubourg du Temple.
Una calle tipo Patronato con carnicerías, comerciantes chinos, indios y árabes.
Tiendas de zapatos y chucherías.
VIDA
mucha vida en esas calles.
Viviría feliz por ahí.
Mezclándome con todo para poder abarcarme con todas mis mezclas.
Y ahí mismo
En la Rue de Temple con la Rue de Parmentier me comí un crêpe delicioso, recién hecho y calientito.
Después agarré metro en Republique hasta Rambuteau y busqué zapatillas y habían tantas que no me compré ninguna.
Y seguí caminando. Mirando. Descubriendo París que es tan re lindo.
Así me dieron las 4 de la tarde y llegué al Grand Palais para ver la expo VIENA 1900.
Gracias a ella me volví fanática de Schiele.
Que tipo más seco, más intenso, más crudo, más expresivo y más oscuro.
Fui con Bianca, asistente de español y muy buena amiga.
Después de hacer cola durante 1 hora y media entramos a deleitarnos con Klimt, Schiele y asociados.
Mala sala para exponer.
Más encima estaba lleno.
En fin.
Tengo flojera.
Después caminamos para buscar un bar y nada por ahí. Todo finolis.
Agarramos metro hasta Saint Michel y encontramos un barcito chori chori
con muchos guapitos franceses y las más rica de todas
CERVEZA GUINNESS
con espuma espesa, color cola de mono.
Ahí departimos hasta que tomamos conciencia del tren y luego de disfrutar de otro crêpe..e
calabaza.
Y heme aquí, contando rapidito para decir buenas noches
hasta mañana
y sería.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Me gustan los recuerdos...si el tiempo fuera como laberinto en espiral...podriamos pegar el oído a una pared para escucharnos respirar al otro lado...diez años atras...

Anónimo dijo...

Viste.
Yo te dije lo de Schiele.

Brígido...

Pilar Navarrete Michelini dijo...

¡tralalá! Nunca se olvide que los últimos serán los primeros. Por eso es un halago que nos digan tercermundistas. Franchutes, no más. Además, estás al borde de la ilegalidad, lo que siempre es un atractivo...
¡Goce!
Besos amiga!

Chiquitita dijo...

Igualito cuando yo llegué, estos franchutes cada vez mas odiosos!!!!